Ya queda menos para que empiece lo que va a ser una maratón de clásicos uno detrás de otro. Las fechas de los encuentros ya concretados, ya las sabemos y los posibles choques que se podrían efectuar, también. Ahora lo único que podemos hacer es esperar y tener paciencia. Esta vez, da igual de que equipo seas. Esta vez, sólo toca disfrutar.
Que en prácticamente un mes haya cuatro clásicos es algo que será recordado en la historia del fútbol ya para siempre. Las opiniones y los resultados que va a ver en torno a estos encuentros son muy diferentes. Están desde los que admiten que el Barcelona es superior y va a pasarle por encima al Madrid, hasta los más cautelosos que afirman que hay bastantes posibilidades de que el conjunto blanco de la sopresa y gane más de un partido a los culés. Lo que parece estar claro es que ambos equipos ya piensan en estos enfrentamientos y van afrontando los partidos que tienen por delante lo más fácilmente posible.
Sin ir más lejos en este fin de semana estuvo el ejemplo. El Real Madrid saltó al campo en San Mamés con un once que bien podía haber sido elegido con los ojos cerrados, pero la efectividad del equipo les llevó a la victoria ante un Athletic Club de Bilbao dormido y sin solvencia. Por otro lado, el Barcelona, acusando las bajas en defensa del ya ausente desde hace mucho tiempo, Puyol y Abidal, además de la sanción de Valdés hizo parecer que el equipo azulgrana estaba como que les faltaba algo. Se ahogaban en un vaso de agua y eso que sólo recibían en casa al Almería y encima, los blanquirrojos con un nuevo entrenador, Roberto Olabe que se estrenaba en Barcelona. No lo hicieron nada mal. Metieron el miedo en el cuerpo al conjunto azulgrana tras hacer el primer gol del partido. Pero se notó que el Barça es el campeón de la Liga y remontó el partido. Quedando finalmente 3 a 1. Todavía les quedan esta semana los partidos de vuelta de la Champions, pero viendo los resultados de la ida, todo apunta a que sus mentes estarán más pendientes de esa maratón que les espera que de tratar de arrasar en esos encuentros.
En menos de un mes, cuatro clásicos. Es imposible cansarse de hablar de este tema, de pensarlo o de debatirlo, es algo histórico. Y las ganas de que empiece son, tanto de merengues como de culés, increíbles. Recuerdo que para el primer choque sólo quedan 5 días. Prepárense.
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